A Don Romualdo le espera un día emocionante. Tiene una cita y quiere que las horas vuelen. Mientras tanto, la ciudad respira y se revuelve. Pero eso sólo lo verás si te tomas este libro con calma, si te paseas sin prisa. Abre los ojos y observa. La curiosidad hará que cuando llegues a la última página, quieras visitar de nuevo cada rincón. Y así será una y otra vez..