En El instinto científico nos embarcamos con Andrés Gomberoff en un divertido, polémico y absorbente viaje intelectual que nos lleva a explorar los orígenes y fundamentos del pensamiento científico, proceso decisivo en la construcción de la cultura occidental y de la joya de su corona: la ciencia. ¿Su propósito? Demostrar que la actividad científica es producto de un instinto humano básico, y, por lo tanto, intrínseco a su naturaleza. Argumenta que el pensamiento mágico y la pseudociencia no son el resultado de la ignorancia o del analfabetismo científico, sino de una represión activa de este instinto, motivada por sesgos y autoengaños arraigados en nuestra propia cultura. El resultado es un abanico de creencias, desde las más disparatadas como el terraplanismo hasta las más peligrosas como la aversión a las vacunas. Sin embargo, nos alerta el autor, las posturas que dificultan el desarrollo de la ciencia no solo se encuentran en estos grupos marginales, sino que también penetran, de modo mucho más sutil pero igualmente peligroso, en círculos políticos e intelectuales establecidos.
Mediante una combinación de lógica rigurosa, evidencia científica sólida y una argumentación convincente, este nuevo libro del autor de Física y berenjenas nos invita a reconocer nuestra capacidad innata de pensar científicamente, y encontrar en esta práctica no solo una forma de comprender el mundo que nos rodea, sino, además, de conocernos a nosotros mismos. Con un enfoque accesible y cautivador, a través de anécdotas cotidianas, experimentos científicos y episodios de la historia, El instinto científico nos ofrece las herramientas necesarias para desarrollar criterios que nos permitan apreciar y preservar esta práctica fundamental y maravillosa que nos define como especie: la ciencia.</p>