"Poemario del que su prologuista José Antonio Ramírez Milena manifiesta: Acercarse a la poesía de Constanza González Ferrer es hacer un ejercicio hacia la introspección, un acercamiento al yo más íntimo y definente del qué se es y cómo a los demás se muestra o representa.
Es un penetrar, imposible si no lo es en los textos, hacia lo más inaccesible del vital vivirse; un atañer los mundos más íntimos con la desnudez más natural y deslumbrante."