Hace ya muchos años que Milton Godoy Orellana se impuso, tanto en Chile como a nivel internacional, en uno de los historiadores más productivos e innovadores en torno al estudio del desierto de Atacama. Desde 2014, ha dedicado la mayor parte de su trabajo de investigación a la ciudad de Taltal y sus alrededores, en el marco de tres proyectos financiados por el Fondo de Ciencia y Tecnología (FONDECYT). Dos años después de la publicación de La puerta del desierto. Estado y región en Atacama: Taltal, 1850-1900, el último de estos proyectos dio origen a este importante libro, que se basa en un volumen muy impresionante de fuentes resultado de un acucioso trabajo en archivos, no sólo en Chile, sino también en Bolivia, Argentina y varios países europeos. Este texto pone en valor la cuestión crucial de la responsabilidad social de los historiadores y, más en general, de los profesionales de las ciencias humanas y sociales en el mundo contemporáneo. […] Por lo tanto, más que nunca hay que destacar esta preocupación por la valorización, difusión o “extensión cultural” -según los términos apreciados por la generación de la Reforma Universitaria hace exactamente un siglo-, ya que nace del deseo de democratización del conocimiento y de la voluntad de que las políticas públicas actuales se basen más en los conocimientos construidos por la ciencia.
