El 24 de junio de 1947 el piloto civil, Kenneth Arnold, denuncia la observación de nueve objetos que se desplazaban de manera extraña por los cielos, mientras volaba su aeronave CallAir A-2 en el Estado de Washington, al norte de Estados Unidos.
A setenta años del nacimiento de la llamada “Era Moderna de los Ovnis”, consta en nuestra sociedad una subcultura muy potente y de gran influencia en todos los medios de comunicación, como también en las redes sociales, que promueve y ampara la creencia de que los fenómenos anómalos observados y denunciados proceden de un origen inteligente y de fuera de nuestro planeta. Esto por una base de credos, actividades comerciales o simples pasatiempos que han elevado este auténtico mito a horizontes sorprendentes, generando la unificación del concepto “ovni” con “extraterrestre” como una composición prácticamente indisoluble.
Siéntase cordialmente invitado a que revisemos y analicemos una síntesis de cómo numerosos investigadores, ufólogos, contactados, abducidos y escépticos han contribuido a la riqueza literaria, verbal o virtual de este tema, ya que estarán detallados para así facilitar enormemente la formación de esta línea de tiempo y sus principales efemérides con las que han forjado la indisciplina, paraciencia, pseudociencia, cociencia, pasatiempo, o como usted simplemente quiera llamar, a la ufología.