“No son muchos —pero existen— los poetas que escriben sobre otros poetas. María Inés Zaldívar es una de ellos. Para ese propósito tiene el saber académico, pero el rasgo dominante en su pensamiento crítico no es la erudición sino la intuición, la captación directa, sin mediaciones, de la esencia del poema.
Zaldívar entra en la palabra poética como Croce aconsejaba: respetándole su estatuto de palabra única, su excepcionalidad y, además, con una conciencia tan propia que rebasa cualquier modelo de análisis. Se reencuentra de ese modo con Huidobro y con Mistral, pero también recupera a Omar Cáceres, a Winétt de Rokha, a Olga Acevedo y a Chela Reyes. Conversa con sus pares, los poetas chilenos de las últimas décadas, con Guillermo Deisler, con Manuel Silva Acevedo, con Gonzalo Millán, con Tomás Harris, con Damaris Calderón, con Elvira Hernández y con Rosabetty Muñoz.
Este es un libro que está compuesto de iluminaciones críticas que son como rayos que nos develan la inconmutable verdad de la poesía.”