El poemario se compone de una serie de crónicas, poemas, samples de canciones, fotografías. Algunas cuestiones centrales: la casa, la carretera, la figura del padre en la literatura. Ruido de fondo oscila entre la distorsión de la rutina y la ficción de la felicidad. Cientos de recuerdos organizados. Cierta incertidumbre existencial atraviesa las imágenes como en un poliedro. En esta especie de disco doble, José Tomás Labarthe remezcla lo fractal y lo biográfico con una voz lírica que fluye como una corriente de música continua.
«En Ruido de fondo [ya el título es una afortunada metáfora del procedimiento], José Tomás Labarthe cultiva sus poemas por sedimentación: bajo una evidente capa narrativa subyacen rasgos minimalistas, fragmentos de conversaciones caóticas y, más densa y hondamente, imágenes: exvotos de experiencia cognitiva que se abren, más que a la afirmación, a la incertidumbre. A ratos pop, pero también sutil y por momentos taciturna, la voz autoral renuncia lo mismo a la estridencia que a la escuela mística del silencio para ofrecer al lector poemas tersos y redondos: perlas, que les llaman».
Lom
Jose Tomas Labarthe Cardemil
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