Una niña muere quemada en un campamento de verano, mientras los monitores responsables, David Bergman y Jonathan Sandberg, se encuentran bañándose en el lago, borrachos. Después de esta tragedia Jonathan nunca logró superar su culpabilidad. Por ello decidió aislarse del mundo y terminó desapareciendo sin dejar rastro. Diez años después, la vida de David ha dado un giro dramático. Su esposa lo ha abandonado, el bufete de abogados donde estaba a punto de convertirse en socio ha cerrado, le han estafado y acumula una deuda imposible de pagar. Cuando el padre de su viejo amigo lo busca y le ofrece la inesperada tarea de encontrar a Jonathan por una suma considerable de dinero, David no puede permitirse el lujo de decir que no. Comienza a investigar y descubre secretos cada vez más oscuros y terribles en la familia Sandberg. Entonces ocurre un brutal asesinato. David está demasiado involucrado en la historia, y ahora teme ser la próxima víctima del asesino.